miércoles, 30 de septiembre de 2015

Sobre eslabones de la cadena histórica de España

En la entrada anterior del blog compartimos hechos simbólicos de eslabones de una larga cadena de  acontecimientos históricos que forjaron la realidad de nuestro país, al igual que ha sucedido a otros países del mundo. Algunos de esos eslabones han sido comentados en “entradas” que se pueden leer  en este blog, sin seguir orden cronológico.  La actualidad nos invita a detenernos iniciado este otoño en estas pasadas elecciones autonómicas catalanas del  27 de septiembre de 2015. Ya están convocadas también las  elecciones generales  del  País  para el 20 de Diciembre, que sin duda serán trascendentales. Hemos comentado igualmente las sucesivas elecciones de reciente pasado, andaluzas, europeas, autonómicas,  donde quedan reflejados el surgimiento de partidos emergentes de nuevo cuño, principalmente Podemos y Ciudadanos C´S,  y el retroceso de los partidos nacionales PP y PSOE que han perdido peso en el electorado por razones que se explican.

 Una vez más, la Generalitat  catalana presidida por Artur Mas  quiere insistir “al mundo “que estas elecciones del 27 de septiembre es como un plebiscito. Los partidarios de la independencia obtuvieron más diputados conjuntados, pero menos votos ciudadanos, con lo cual se ha demostrado que no era mayoría los independentistas, defensores de un futuro Estado republicano catalán.

¿Qué ha pasado? ¿Cómo  se ha llegado a este disloque en este año 2015? Así llevan  un lustro y muchos años de sibilina traición al conjunto de España.

Mientras gobernó su jefe, el antaño  nacionalista de CIU  y  “honorable “  Jordi Pujol, hoy deshonrado por sí mismo y su familia corrupta,  el caldo caliente de Convergencia y Unión no se salía del plato mientras soplaba y engullía, mientras se iba gestando poco a poco la felonía. Los partidos constitucionales PP y PSOE hacían como que no se enteraban,  necesitados de sus votos  para gobernar y además  “pacían”,  entregados a sus poltronas y trifulcas  del poder. Todo parecía ir divinamente en el Estado monárquico,  constitucional, liberal parlamentario,  que en dos décadas se había  sacudido del polvo de lo que quedaba del anterior régimen  “francamente perecido”.

 El  régimen de 1978 de la segunda restauración borbónica, tras el franquismo, que había logrado un consenso nacional de paz y concordia logrando cotas de gloria y de marca democrática de libertades con  autonomías regionales y locales,  con ayuda y recursos financieros de la Unión Europea parecía el país de las delicias: Juegos olímpicos  de Barcelona,  V Centenario del Descubrimiento, Expo de Sevilla, AVE, etc, la marca España, incluido Campeona mundial de Fútbol.  El gozo en un pozo. Se descubre  en el siglo XXI,  que nada es lo que parece  y después de treinta años, tras el boom, España se convierte en un problema con una crisis nacional junto a otra de contexto euro atlántico.  

El gobierno del socialista Rodríguez  Zapatero decepciona de tal forma a la opinión pública que el electorado se vuelca con el PP de Rajoy dándole  la  mayoría absoluta en 2011. Rajoy  recibió una mala herencia económica del gobierno anterior pero también se descubre que tiene los pies de barro  por la corrupción extendida en sus propias filas. Rajoy  parecía recordarnos al Laocoonte, la escultura clásica,  que advirtió del peligro del caballo de Troya, regalo envenenado del que había que deshacerse. Pero no le hicieron caso y terminó siendo atenazado por la serpientes marinas enemigas, viendo el fin de sus hijos y el drama de su propia destino.


domingo, 27 de septiembre de 2015

Estudiemos nuestra Historia


El puzzle de ahora, en esta quincena del siglo XXI , “el lío” que nos recuerda el llamado   “laberinto español” del inglés  Gerald Brenan, de aquellos años 30 del siglo pasado, de febril convivencia, con ansia separatista catalana,  vuelve a retoñar casi cien años después contra la unidad de España. Nuestro ferviente deseo es que  el seny, o  la inteligencia o la experiencia  histórica  catalana se impongan a la algarabía actual  en nuestra  Cataluña hispana y europea por el bien de todos. ¡De nuevo, la amenaza de SECESIÓN!, principalmente en Cataluña, en España,  y no sólo en España. Qué pocos españoles saben o recuerdan cómo se produjo y con tanto esfuerzo clarividente el primer Estado moderno de Europa, el nuestro,  en la antigua tierra de la Hispania romana. Un  proceso de integración semejante al de Francia, el de la Galia romana.

 Tras el salto de la Historia, Europa se convierte en un variado mosaico de pueblos de rica cultura, en difícil parto de proyección universal y de unidad, tras dramas y tragedias conflictivas, sin par. Varios milenios han sido necesarios para conseguir la realidad de esta España y de esta Europa del siglo XXI. Quinientos años para conseguir la unidad de España. Con Isabel Iª de Castilla, la Grande y con su esposo Fernando, audaz  rey de Aragón y Cataluña se iniciaron las bases de ese Estado crecido bajo  la monarquía de la Casa de Austria (Carlos V, Felipe II, Felipe III, Felipe IV y Carlos II, que  sin poder dar éste último un heredero , muere dejando una herencia familiar de Guerra europea y de guerra civil entre españoles, (partidarios entremezclados castellanos y catalanes) conocida como la Guerra de Sucesión: partidarios de Felipe d´Anjou, nieto de Luis XIV, jefe de la Casa de Borbón  y los partidarios del archiduque Carlos de la Casa de Austria, con la ayuda e interés bastardo, comprensible, de Inglaterra, Holanda, etc. a favor de los Austrias.

Tras Felipe d´Anjou , denominado Felipe V de Borbón (siempre Felipe) le sucederá tras su victoria en la Sucesión Fernando VI, Carlos III, Carlos IV, Fernando VII… hasta llegar a nuestro actual Felipe VI de Borbón, hijo de Juan Carlos I. Esos puntos suspensivos se rellenan con todo el siglo político decimonónico (María Cristina, Isabel II, destronamiento de ésta, regencias, primera  República, golpe de Pavía,  Proclamación de Alfonso XII de Borbón), y entramos en el siglo XX con  Alfonso  XIII,  Dictadura del general  Primo de Rivera, caída de Alfonso  XIII, segunda  República española (5 años), Guerra civil, Dictadura franquista, consenso de paz acordada, Transición Política, Monarquía constitucional con  Juan Carlos I de Borbón, Constitución de 1978, pactada y votada en referéndum nacional.

Es la gran cadena de las historias patrias con eslabones decisivos que las han configurado. En el caso de Cataluña con el resto de España hay eslabones esenciales en los que hay que detenerse para comprender incluso problemas actuales. Uno, la confección de la Unidad española;  dos, sus consecuencias inmediatas: proceso de integración, expansión y política universal; tres, dónde, cuándo, cómo y por qué  chirrían los goznes de esa larga cadena; cuarto, ver cómo  se ha planteado o descuidado  los problemas  que se han ido  acumulando a  lo largo del tiempo; Esto explicará que ese colectivo nacional haya servido a “unidad moral de destino” o a una “invitación incivil al desatino”.


¿Cómo se ha explicado esto a las distintas generaciones? Cómo se ha culturizado a los ciudadanos? ¿Qué papel ha desarrollado la clase dirigentes de todo el espectro social? De ahí que los más pensantes e ilustres inteligencias choquen con una realidad que les lleva al pesimismo: “España, enigma histórico”, “España, de los frutos tardíos”. ”España sin pulso”, “España con problema”, España sin problema”, “España como problema”, “Es español quien no puede ser otra cosa” “España, qué bonita eres”, “¡español, español, español”!…  Es volver a reflexionar sobre la trama de la confección histórica de España. Que no deja de ser aburrido o emocionante, según  con qué ojos la miran. Hay españoles caducos que no quieren serlo, hay extraños que  sienten emoción por la España vital y su Historia. Intentaremos contactar con un eslabón cronológico de esa cadena histórica del país, para  desarrollar mínimamente el hilo del gran ovillo que nos lleva a saber qué nos ha pasado, qué pasa ahora y qué nos puede pasar en un futuro.