El Pais, de 23 de Marzo 2015, ofrece
gráficamente los datos de esas
llamativas elecciones autonómicas en
solitario de la Comunidad andaluza.
En primera página en gruesos caracteres se lee
como entrada : “Díaz obtiene sólida mayoría”. Matiza que Susana
Díaz (PSOE) ha estado a ocho escaños de la mayoría absoluta, a la que
aspiraba para gobernar en solitario, por lo que tendrá que hacer un juego de
equilibrio para gobernar, Con todo, logra mejor resultado de lo previsto, aún
con pérdidas de votos.
El Partido Popular no ha podido
evitar el desastre, recibe la peor votación en 20 años. Ha pasado de 50
escaños a 33, perdiendo 17 diputados; el PP se desinfla en Sevilla, pierde Córdoba
y provincia de Granada y el Partido de Maillo (izquierda Unida), que ha obtenido los peores resultado de su
historia, es incapaz de resistir el
fuerte avance de Teresa Rodríguez (Podemos), que esperaba más escaños. Ciudadanos entra con fuerza en el
Parlamento, donde será un grupo clave; si
bien Albert Rivera, que se presenta por primera vez fuera de Cataluña, advierte que no van a estar en el gobierno. Al
partido de Rosa Díez, UPy D, no se le nombra, pues sigue sin tener representación en
el parlamento andaluz.
El Mundo escribe en primera página que “Díaz” se legitima, el PP queda tocado e irrumpen Podemos y Ciudadanos. El editorial
constata el éxito de Susana Díaz a costa del PP y de la irrupción de los nuevos
partidos. La veterana periodista Victoria
Prego escribe en El Mundo que “Díaz
da la cara y Rajoy la pierde”, y que
de paso resiste a Podemos que tenían
más expectativas todavía.
Izquierda Unida, de mandar en la Junta ha perdido la
mitad de sus diputados. UPyD, fracasa
por tercera vez y sufre un fuerte retroceso ante la irrupción de Ciudadanos. La única opción posible para Díaz es pactar con Ciudadanos que ha repetido cuáles son sus opciones. Albert
Rivera manifiesta con satisfacción y
prudente euforia que en verdad “han sido la grata sorpresa para muchos”, que “sus
enemigos son sólo el paro, la corrupción y la crisis de confianza”, pero no
pactan con la corrupción.
Concluye Victoria Prego que mucho de lo ocurrido en este 22 de marzo
de 2015, tiene que ver con el “hartazgo” de los ciudadanos en cuanto tales y
que lo ocurrido en estas primeras elecciones autonómicas pueden servir de
experimento. Una prueba para los partidos nacionales, que han gobernado después
de la Transición.